Tarta de Nata Portuguesa

Cómo preparar la base de la tarta:

• Trituramos las galletas bien en un robot de cocina o metiéndolas en una bolsa apta para alimentos y pasando un rodillo hasta que queden prácticamente como una arena fina. No te preocupes si te quedan algunos trozos más grandes, no tendrás problema a la hora de formar la base.
• Derretimos la mantequilla en el microondas durante pequeños intervalos de tiempo.
• Una vez fundida la mantequilla la incorporamos a la galleta triturada. Mezcla bien ambos ingredientes, que no quede galleta seca.
• Colocamos la mezcla en la base de nuestro molde y la vamos presionando con la ayuda de una cuchara, para nivelarla y compactarla, obteniendo la base de nuestra tarta.
• Dejamos el molde en el frigorífico para que la base vaya endureciendo mientras hacemos el relleno.
   

Cómo preparar el relleno de la tarta de nata:

• Montamos la nata. Si se trata de nata vegetal, podernos montarla hasta que quede firme, pues esta nata aguanta más que la animal y no se cortará aunque tengamos que removerla después al añadir los demás ingredientes. Si la nata es de procedencia animal, la montaremos hasta obtener picos suaves para que no se nos corte después.
• Hidratamos la gelatina en agua. Ponemos el agua fría en un vaso y añadimos la gelatina en forma de lluvia. Dejamos reposar unos minutos hasta que se forme una especie de gel (gelatina hidratada). Reservamos hasta el momento de utilizar.
• Añadimos la leche condensada y la gelatina y mezclamos todos los ingredientes con movimientos envolventes hasta que queden bien integrados.

• Vertemos la mezcla en el molde y lo removemos un poco de lado a lado para rellenar cualquier hueco que haya podido quedar por dentro.

• Alisamos bien la superficie y cubrimos el molde con papel film para llevarlo al congelador durante toda la noche.

Decoración de la Tarta de Nata:

• Trituramos las tres galletas y las esparcimos por toda la superficie de la tarta (la tarta de nata la tendremos aún en el molde).
• Nivelamos bien la capa de galleta.
• Desmoldamos y la dejamos atemperar unos minutos para cortarla con facilidad.

Conservación de la Tarta Portuguesa:

• Esta tarta podemos conservarla en la nevera por tres o cuatro días dentro de una caja para tartas para que no absorba olores.

NOTAS:
1.    La gelatina que he usado es en polvo. Esta gelatina se hidrata en un líquido frío como leche o agua. Si el líquido tiene una temperatura superior a 30ºC, puede perder su poder gelificante.

2.    El molde que he usado es perfecto para este tipo de tartas, pues encaja a la perfección y hace que no sea necesario forrarlo con papel. Además, puedes presentar la tarta en la misma base del molde, ya que es un plato de cerámica precioso.
Como has visto, se trata de una tarta sencilla y refrescante, perfecta para hacerla y degustarla en familia.
 

Un saludo,

Ana Cristina