¡Avanza el verano y nosotros seguimos en modo helado!
En esta ocasión te traemos la receta o, mejor dicho, el recetón de un helado muy especial y muy delicioso: ¡Helado de Kinder Bueno!
Siiiii un helado elaborado con las deliciosas barritas de crujiente barquillo y relleno de cremoso de leche y avellanas.
Seas fan o no, de las barritas de kínder, este helado te aseguro que te va a encanta!, ya te digo yo, que no te vas a poder comer sólo uno... eso es casi imposible.
Esta receta de helado tipo magnum de Kinder Bueno además de ser deliciosaes súper sencilla y podrás hacerla con heladera o sin ella (en la descripción de la receta te explico cómo hacerla de las dos formas).
Sigue este veranos todas nuestras recetas de helado y no nos pierdas de vista, tenemos muchas recetas con las que te vamos a sorprender y refrescar.
Para hidratar la gelatina en hojas hay que ponerla a remojo en agua fría durante unos 10 minutos.
Pasado este tiempo hay que cogerlas y escurrir suavemente el exceso de agua antes de añadirlas a la preparación.
En un bol, batir el azúcar con las yemas de huevo, hasta obtener una crema esponjosa de color amarillo pálido. Reservar.
Poner en un cazo a fuego medio, la nata y la glucosa. Remover constantemente hasta que la nata rompa a hervir (si tenemos un termómetro de cocina, observaremos que la temperatura rondará los 90ºC).
Verter la nata poco a poco y sin dejar de batir sobre el bol en el que teníamos reservada la mezcla de yemas y azúcar. Batir hasta incorporar toda la nata y conseguir una crema lisa, suave y homogénea.
De nuevo verter la crema sobre el cazo y ponerlo a fuego bajo-medio. Removemos constantemente hasta que la crema empiece a espesar (aproximadamente entre los 80-85ºC).
Retirar el cazo del fuego y añadir la gelatina hidratada. Mezclamos hasta que la gelatina se funda y se integre perfectamente.
Pasamos la mezcla por un colador fino y reservamos en un bol.
Mezclamos la leche entera con la leche en polvo. Añadimos una barrita de kinder bueno y lo trituramos todo.
Añadimos la mezcla de leche y kinder bueno, a la crema anterior y de nuevo batimos para conseguir una crema homogénea.
Ahora vamos a ver cómo hacer el helado de kinder bueno con y sin heladera.
Con heladera:
Reservamos la crema en el frigorífico durante 2-3 horas o hasta tenerla perfectamente fría (aproximadamente a 5ºC).
Seguimos las instrucciones de nuestra heladera.
Vertemos la crema (con las aspas de la heladera funcionando) y dejamos mantecar durante unos 30 minutos o hasta observar que la textura de nuestro helado es cremosa y suave, con una consistencia o textura de helado.
Apagar la heladera y vertemos nuestro helado en un bol.
Sin heladera:
Con la crema igualmente a 5ºC (aproximadamente), la verteremos sobre un bol y lo meteremos en el congelador durante unas 2 horas aproximadamente.
Pasado este tiempo, con unas varillas, mezclaremos la crema ligeramente.
Con heladera o sin heladera, llegados a éste punto, con la crema de helado con una textura cremosa y suave, troceamos 2 barritas de kínder bueno y las mezclamos con el helado.
Rellenamos las cavidades del molde, les ponemos los palitos de madera, alisamos la superficie y lo metemos en el congelador unas 4-5 horas o hasta tenerlos perfectamente congelados.
Para bañar los helados, derretimos el chocolate con leche al microondas o al baño maría junto con la manteca de cacao.
Gracias a la manteca de cacao el chocolate derretido quedará más fluido, esto nos permitirá bañar nuestros helados de kinder buenos fácilmente
Troceamos 1 barrita de kínder bueno y la mezclamos con el chocolate derretido.
Desmoldamos los helados del molde y los bañamos con el chocolate.
Si no los vamos a degustar inmediatamente, reservar en el congelador.
Una vez bañados en chocolate deja secar los helados sobre una bandeja o plato cubierto con papel de horno.